…
-¿Está usted seguro de que no suena así?
-No, pero usted tampoco.
-Bueno, yo estoy seguro de que mi vida no me pertenece.
-Entonces... ¿A quien?
-A la Vida.
-¿Y que es la vida?
-La Vida es todo.
-¿Y la muerte también?
-La muerte es nacer más veces.
-¿Cómo?
-La muerte es consecuencia de haber nacido y haber nacido es consecuencia de haber muerto. Todo se debe a la estructura esencial de la vida. A su ciclo.
-Está bien. Tiene su lógica…¿pero como lo sabe? ¿Cómo puede asegurar tal cosa?
-Yo no lo se, pero la Vida si. Pregúntele a ella.
-¿Usted le preguntó?
-Si. Y me contestó exactamente lo que le acabo de decir.
-O sea que si la vida es todo, ¿todo le contestó a usted?
-Si.
-Pues yo sigo sin estar seguro.
-Pues póngase a salvo.
-¿A salvo de que?.
-De su opinar con su ignorancia.
-¿Acaso me está llamando ignorante?.
-No. Una cosa es hacer tonterías y otra ser tonto. Solo le digo que si ignora algo, pregúntele a la Vida y le contestará.
...
-¿Mi ignorancia... no puede opinar?.
-Si, usted es totalmente libre. Pero lo único que le dará estabilidad es ponerse a salvo de una forma cerrada de ver las cosas que le suceden.
-¡Yo he estudiado 3 carreras universitarias, oiga!. Y no ignoro que ignoro… No soy feliz, pero me aguanto. Más vale eso que creerse un sabio (como usted, piensa).
-Usted es sabio, si rectifica en las actitudes que le hacen daño. No es cuestión de estudiar nada, es cuestión de no negarse a uno mismo aprehender de si mismo.
-¿Que edad tiene usted?.
-La edad del Sol.
-¡Joderrr! ¿Otra de sus teorías?
-No, es solo una constatación física.
-¿Puede probarlo?
-Mírese las manos… ¿que ve?
-Veo cinco dedos en cada una unidos a dos palmas, piel y uñas.
-¿Y que más?
-Veo… pliegues y muchas curvas… ¡formas de manos, vamos!
-¿Y que más?
-No veo nada más y me arde el píloro.
-Fíjese bien y dejará de arderle.
...
-¡Ah!, están unidas al resto del cuerpo. ¿Es eso?
- Pues si, empieza a ser. A veces, la conexión no se ve a primera vista. De tal forma que sus manos están unidas al resto de su cuerpo y usted puede verlo, el resto de su cuerpo está unido a el resto de la vida, aunque usted no pueda verlo a primera vista.
-Y...por tanto… ¿al sol?
-Si. Y siendo así, usted y yo tenemos la misma edad. Una edad que nos permite recordarlo todo, incluso el futuro.
-Y ¿cómo se recuerda algo que no se ha vivido?
-¿Está usted seguro de que no ha vivido su futuro?
De pronto suena un móvil varias veces.
-¿No va a coger el móvil?
-Yo no tengo un móvil físico, si no espiritual.
-Pues el mío, físico, tampoco es. No suena así.
…
No hay comentarios:
Publicar un comentario