Músicos posibles

“Cuando el río suena… es que un músico se está ahogando”
 -Un músico-

    ¿Ha pensado alguna vez la importancia que tiene la Música en su vida? Y no hablo solo de las grabaciones musicales, si no de la Música en vivo…

     ¿Ha pensado que la Música que escucha es posible gracias a los músicos?. ¿A personas físicas? Y no solo a los que se llevan la fama, si no a todas aquellas personas que se dedican a realizar Música, o al menos aspiran. Hay que practicar.

    Todas las personas, en general, trabajan para conseguir dinero para conseguir cosas. Los músicos también. La mayoría de estos, tan válidos como los “grandes nombres”, dedican más tiempo a solventar situaciones para poder siquiera practicar, que a tocar.

     En un barrio de la ciudad del pájaro con alas de arena hay una ruta de vinos y un lugar para los buenos sucesos. Hay lugares posibles, llamados underground, que emergen de la Tierra, montados sobre un ahora que está sujeto a una la realidad común y mortal, pero que genera focos de infección saludable y vital.

    La Caja de Músicos es una posibilidad que lleva un tiempo funcionando y que puede dejar de funcionar en cualquier momento, lo diga o no el señor agente o el señor legislador... Mientras, toca tocar. Músicos, para más señas. Músicos posibles.  Gratis, que no gratuito. GratifiCante.

    Músicos sin recursos económicos que les permitan dedicarse a la Música y no a los dictados sociales de las modas que empobrecen a la mayoría. Sin locales de ensayo, sin lugares para tocar sin ser  amonestados, detenidos, multados. Desde siempre. Músicos nómadas con la música a otra parte, siempre mudandose. Benditos proscritos y malditos, pero en vivo, en directo, por todos lados, creando una Pandemia musical… Fundiendo los cañones para devolverlos campanas.

    Sois bienvenidos aquí. Podéis desencajaros en la Caja.  Ojalá hubiera muchas más opciones, pero esta es real. No os haréis ricos, pero viviréis la mezcla. Hay que hacerlo con cariño. A veces se ha de bajar el volumen para respetar el descanso. Solo así los músicos serán respetados. Convivencia.

    Géneros, estilos y nacionalidades con un punto de encuentro, incluso con el desencuentro. Unos buscan, otros se ponen en disposición, otros investigan, otros hacen música al escuchar y todos tan ricamente. Sin demasiados afanes, pocas palabras y muchos hechos. Pasando a la acción. Teniendo en cuenta a los poderes públicos y a la clase poliética que lleva interponiendo documentos tan legales como ilegítimos, este lugar, La Caja de Músicos, no es políticamente correcto. Es ética y poéticamente correctisimo.

     O, dicho de otra forma, la Música es un bien de la humanidad para toda la sociedad y esta debe permitir espacios y facilitar condiciones a los músicos, ya que ellos son el verdadero soporte musical y enriquecen espiritualmente a la sociedad. Se trata de fomentar lo saludable y la medicina musical pasa por diluir la autocomplacencia de la grabación y el soporte. Sin devaluar estos, es relevante el hecho vivo que aportan personas que, en ocasiones, reúnen en una rumba muchas experiencias y soluciones sonoras. Músicos, para más notas. Afortunados los que se lleven un trocito de vida en actitudes tan humanas y necesarias como la Musical. Vivir la Música, sin vivir de ella, ok. Pero si con ella. Convivir la Música, entre músicos. De mientras, posible.

Gracias a los músicos, aunque parezcan imposibles.

“No hay fusión de músicas, si no de músicos” –Paco de Lucía-